La resistencia es clave en deportes como ciclismo, atletismo, natación o crossfit. Mantener la energía alta durante esfuerzos prolongados requiere no solo entrenamiento, sino también una suplementación inteligente.
1. Carbohidratos de liberación rápida:
Durante sesiones largas, consumir carbohidratos (geles, bebidas isotónicas) mantiene estable la glucemia, evitando “la pájara” o caída brutal de energía. La recomendación habitual es 30-60 g/hora, según intensidad y tolerancia gastrointestinal.
2. Cafeína:
Mejora el rendimiento, reduce la percepción de esfuerzo y ayuda a prolongar la resistencia. La dosis efectiva suele ser de 3-6 mg/kg de peso, 30-60 minutos antes del ejercicio.
3. Beta-alanina:
Ayuda a retrasar la acumulación de ácido láctico, lo cual es clave en esfuerzos de alta intensidad. Su efecto es más marcado tras varias semanas de uso continuado.
4. Nitratos (jugos de remolacha):
Pueden aumentar la eficiencia muscular y reducir el consumo de oxígeno, especialmente útiles en deportes de resistencia.
5. Electrolitos:
Indispensables para reponer sodio, potasio y magnesio perdidos por el sudor. Evitan calambres y mejoran la hidratación.
No todos necesitan suplementos, pero en deportes exigentes, elegir los adecuados puede marcar la diferencia entre terminar fuerte o quedar exhausto antes de tiempo.