La testosterona es una hormona clave para el rendimiento deportivo, la fuerza, la masa muscular y el bienestar general. Con el paso de los años, sus niveles tienden a disminuir, lo que puede afectar energía, motivación y resultados en el entrenamiento. Por eso, muchos hombres buscan estrategias naturales para mantenerla en rangos óptimos.
Existen suplementos naturales que, si bien no hacen milagros, pueden contribuir a mantener o elevar ligeramente los niveles de testosterona, especialmente en hombres con deficiencias leves. Entre los más destacados se encuentran:
Zinc: Fundamental para la producción hormonal. Su déficit puede estar relacionado con niveles bajos de testosterona.
Vitamina D: Niveles bajos de vitamina D se asocian con menores niveles de testosterona. Tomar sol o suplementar puede ayudar a corregirlo.
Ashwagandha: Planta adaptógena que ha demostrado aumentar ligeramente la testosterona y reducir el cortisol, la hormona del estrés que puede inhibir la producción hormonal.
Tribulus terrestris: Muy popular, aunque sus efectos suelen ser modestos y más notorios en personas con deficiencia hormonal.
Magnesio: Un mineral esencial para cientos de procesos corporales, incluida la producción hormonal.
Más allá de los suplementos, mantener un buen descanso, entrenar con intensidad moderada, reducir el estrés y llevar una dieta rica en nutrientes son las bases para optimizar la testosterona de forma natural. Los suplementos pueden ser aliados, pero no sustituyen un estilo de vida saludable.