ZMA es un suplemento que combina zinc, magnesio y vitamina B6. Se hizo popular en el ámbito deportivo porque se le atribuyen efectos sobre la calidad del sueño, la recuperación muscular y, en algunos casos, el aumento de testosterona.
Zinc: Fundamental para el sistema inmunológico, la síntesis proteica y la producción hormonal. Su déficit puede comprometer el rendimiento físico.
Magnesio: Ayuda a relajar los músculos y el sistema nervioso. Puede mejorar el sueño y prevenir calambres nocturnos.
Vitamina B6: Participa en el metabolismo energético y en la producción de neurotransmisores relacionados con el descanso y el estado de ánimo.
Aunque se han promocionado efectos sobre el aumento de testosterona, las investigaciones muestran resultados modestos, especialmente en personas con niveles hormonales normales. Su beneficio más sólido es en la calidad del sueño y la recuperación, lo cual es clave para atletas que entrenan a alta intensidad.
La dosis estándar suele tomarse antes de acostarse. Es seguro en cantidades moderadas, pero siempre es aconsejable no exceder las dosis recomendadas.
En síntesis, ZMA no es un suplemento milagroso, pero puede ser útil para quienes buscan mejorar el descanso y apoyar la recuperación muscular.
